Pesito, el leoncito comerciante

PESITO EL LEONCITO COMERCIANTE Pesito era un leoncito que se hizo una casita toda pintada de azul, con ventanas amarillas y techo rojo. Tan linda era la casita que Pesito pensó: “La voy a vender y con las moneditas que me den, me compraré un palacio” Pero nadie tenía moneditas en la selva. Entonces Pesito cambió la casita por un violín. -Tocaré músicas lindas –dijo Pesito-, y me regalarán cosas que cambiaré por un palacio. Pero tocó tan mal que todos le tiraron zapatos. Cansado de tanto zapatazo, Pesito cambió el violín por un auto muy viejo. -Le pondré una banderita y será un taxímetro. Llevaré a la escuela a los animalitos, y ganaré muchas moneditas para comprarme un palacio. Pero Pesito se había olvidado que en la selva no había moneditas, y claro, tuvo que cambiar el autito por una cocina. En la cocina, se puso a cocinar cosas ricas, y puso una confitería y hubo una fiesta al empezar a vender. Pero otra vez lo mismo: no había moneditas, y nadie pudo pagarle ni siquiera la esq...